viernes, 22 de mayo de 2009

Libros que he leído IV: Puré de Papas...



1998. En una entrada anterior sobre este tópico expliqué como "conocí" al profe Rius. Y tras tener ese enorme privilegio de leer su Revolucioncita Mexicana, me quedó el gusto de seguir conociendo su obra, adentrándome en esa chingona forma de pensar y ver el mundo, y el siguiente libro que quedó fuertemente marcado en mi memoria, siendo uno de los diez libros más importantes que he leído en mi vida, con todo lo que ello conlleva -el cambio de actitud, de pensamientos, de hábitos, a un nivel increíble, marcando un antes y un después en mi vida, todo un hito intelectual y espiritual-, fue Puré de Papas...

Desde niño tenía mis dudas respecto a la religión y quienes la dirigen. Pero estaba en el seno de una familia católica, iba a la doctrina aún después de haber hecho la primera comunión, me sabía de memoria todo el catecismo y rezos vulgares... vivo en una de las ciudades más mojigatas del país... de alguna forma buscaba una respuesta, pero no sabía formular la pregunta adecuada. Y leer la biblia sólo me hizo entrar en más dudas.

Al caer este librajo en mis manos, cambió todo... me quitó telarañas de tres lustros de pesadez... e iniciaba un largo camino espiritual en el que he descubierto que las religiones son una mierda, que la espiritualidad recide en una moral íntegra, estar en armonía con los demás sistemas del cosmos, en no dañar a los demás... pero tampoco en dejarse y ser abofeteado en la otra mejilla como manda masoquista.

En particular este libro me hizo ver con gran asco lo que fue, es, y será por siempre, la iglesia católica apostólica romana por doquier pose sus reales: una mierda completa, en diferentes matices, olores, tamaños, pero mierda a fin de cuentas.

Ha hecho demasiado daño a lo largo de la historia. y esta breve relación de daños, solamente conferida a sus los "máximos representantes de Jesús en al tierra", fue lo suficientemente hiriente para mis sentidos, para que pudiera dar el paso: mandar a la mierda esa religión.

Papas gays -lo cual no es aberración: lo aberrante es que lo condenaban y mataban a los que lo fueran y en la intimidad eran cojidos por efebos de enormes pijas-, casados -ídem castidad-, mujeres, niños, borrachos, violadores, asesinos, piratas, ladrones, genocidas, más herejes que los que condenaban en la hoguera...

La lectura no la recomiendo para aquellos que tengan firmes creencias católicas. Resultaría un choque brutal. Un doble vínculo que llevaría a la psicosis...

A mi me encanta, y hasta lo presté una vez en la secundaria, poco después de leerlo -por eso se nota maltratadísimo: ese día la maestra Albita nos tenía de esclavos limpiando la escuela y pintando su mugrero-; siendo desde entonces uno de mis grandes consentidos para la consulta, la ironía y las lágrimas... hasta cuando, Petrus Romanus???

Aunque debo admitir algo: no digo que de haber terminado sus reformas religiosas Juanito XXIII, y de no haber sido asesinado en complot Juan Pablo I --¿¿¿hasta donde la responsabilidad histórica del cerdo Wojtyla en esto???--, durando lo que duró su anticomunistoide y amigo de Pinochet-Videla-Stroessner-Reagan-etc sucesor, sería un caólico practicante, pero sí que la iglesia hoy sería otra cosa, y no estaría a punto de la bancarrota moral que se avecina, por los casos de pedofilía, su infinita corrupción, sus alianzas con lo peor de la humanidad, su cerrazón a los tiempos modernos desde el condón, la píldora, el rock, la eutanasia y las nuevas teorías científicas que vienen a terminar miles de años de ignorancia colectiva...

Amen...

No hay comentarios:

Publicar un comentario