De niño, cuando andaba pata de perro por todos lados, ya sea quemando gatos, a pedradas disputándome mi territorio con la banda, pidiendo Halloween, o viendo si la virgen lloró, por lo más que se preocupaba mi madre era por el “robachicos”. Porque era muy sonado, y todo un escándalo, cuando un niño desaparecía de la ciudad. Los noticieros de radio y los periódicos lo mentaban toda la santa semana. “Supiste del niño que robaron en tal colonia”…
Yo podía andar libremente echando mi desmadre nerd hasta las 10 de la noche. Viajar a colonias lejanísimas en bicicleta –a escondidas, jajaja-, en medio de bulevares sin tanto pedo. Esto, finales de los ochentas, inicios de los noventas.
¿Cómo es que cambio tanto mi entorno y parece ser que ni cuenta me dí?
Ya es común ver en los noticieros veinte descabezados en Tijuana, granada en Monterrey –saludos!-, cinco entambados en Toluca, treinta “levantados” en Durango, asesinato del comandante de Navolato, del procurador en Culiacán, del juez de distrito en sepalachingada… todo el mismo día!
Y me recuerda a las notas de Irak. Cuando el loco bélico de Georgie III invadió a la antigua Mesopotamia, al inicio las notas de atentados eran del todo llamativas para el público. Pero la muerte se fue haciendo tan común, que pasó a segundo término. Había 100 muertos por coche bomba en Karbala… ¿y? ¡Hay pinches musulmanes muertos todos los días! ¿Cuál es la nota?
Así pasa ya acá. De tanto pinche muerto, ya no llama la atención la nota. Sólo cuando pasa algo realmente novedoso, como que te caiga el avión del Secretario de Gobernación, el hombre más poderoso del país, por… ¿accidente?... es cuando cambian las cosas. Pero no mucho. Entre el miedo de vivir así y la indiferencia, desaparece pronto la nota roja.
¿O de plano es terror lo que ya sentimos, disfrazados de valemadrismo? ¿Parece que emulamos al próximo asesor de asuntos hemisféricos de Obama, Fox, en aquello de no leer para ser felices? ¿De ignorar la realidad y sumergirnos en una fantástica burbuja de magia y fantasía donde todo gira bien y nada malo se puede colar?
Quizá lo de Irak, por verlo lejano, sí era real indiferencia. Allá que se hagan bolas esos pendejos. Pero no vemos los noticiarios mexicanos, ni leemos los diarios, porque la cosa está de la madre. Un putero de muertos para dónde se vea el mapa. Y de las formas más cabronas. Cuando aquí en León pasó lo del Guaje, zas, la histeria invadió la ciudad… y eso que fue de pasadita. ¿Cómo se deben sentir los que viven en Culiacán, Tijuana o Monterrey, dónde la delincuencia ya sentó sus reales?
Muertos, atentados, tráfico de drogas, secuestros… por cada supuesto narco que captura el gobierno federal, salen dos más… o cuatro secuestradores… u ocho nuevos funcionarios corruptos… peor que la Hidra de Hércules!
Y reitero… ¿cómo caraxos llegamos aquí?
En mis múltiples correos basura del 2006, a favor del Peje, puse que el fraude perpetrado contra él, y los 15 millones y centavos que votamos por él, no sólo era una chingadera de proporciones colosales, megadocumentado por todos lados… sino que sentaba las bases de lo sencillo que era violar la ley. Al violar una ley, el sistema legal del cual emana corre el peligro de colapsarse sobre sí. Pues al violar una ley vulneras otras… mismas que también serán violadas por diversos actores y acarrearán males cada vez mayores.
Y, curiosamente, las cosas se comenzaron a poner feas, feas, desde que entró el enanito militar de Los Pinos. Digo, esto viene de tiempo. De la ineptitud y corruptelas del PRI tras tantas décadas de impune gobierno. Y, si nos vamos lejos, desde la fundación de esta especie de país. Un pueblo sumiso, un puñado de cabrones vivales que se aprovechan de él. Revueltas periódicas para que todo quedará igual, o peor, y con mucha desunión de las partes, para repetir el ciclo. Desunión, pendejismo y analfabetismo, la fórmula perfecta para que de nuevo el puñado de cabrones nos hagan como se les hinchen las ganas. Llámense estos cabrones Cortés, Iturbide, Santa Ana, Porfirio, Carranza, Calles, Ordaz, Salinas, Fox, Felipe y los que le sigan, con sus cuates y compromisos a saldar por elevarlos al poder al estilo del haiga sido como haiga sido.
Pero se ahondó más y más desde 2007. Valió madre el país en proporciones apocalípticas. En la mente de los delincuentes, al ver como todas las autoridades se hicieron patas ante tremendo fraude, valiéndoles una reverenda chingada si el pueblo se levantaba en armas –Acteal, APPO, mineros, y pejezombies combinados en 2006, listos para partirnos la madre si era necesario-, importándoles un reverendo pepino si era justo o no, con tal de seguir en el poder, y al amparo del poder… digo… así que delincuente no se anima a hacer lo que le de su chingada gana. Si lo hicieron los que supuestamente llevan las riendas de la estabilidad social… porque ellos no???
En estos dos años se han duplicado todas las estadísticas sanguinolentas del sexenio del inepto de Fox, quien mucha culpa tiene de cómo estamos. Si en vez de dejar de lado su aberrante obsesión sexual contra el Peje, hubiera echado mano de los mismos recursos para acabar con el narco, otro pinche país sería. Pero prefirió que lo protegieran de sus corruptelas –y de las de los hijos de la señora Martha, faltaba más-, y casarse por la iglesia, aunque a algunos (¿?) no les caiga bien la noticia, que aplastar al narco de tajo.
Maquiavelo dice en su doctorado llamado El Príncipe, que cuando un líder se da cuenta de un mal del estado, que ya ha sido visto por todo mundo, es demasiado tarde… y es un pendejo. Así nos pasó acá. Creo que por más spots dónde salgan la Trevi y Lucerito diciéndonos que todo está bien, ya nadie se la cree. Todos vivimos con cierto temor. Abundan las cadenas ya no de fotos de nenas desnudas o de rezos a san Juan Diego, sino de medidas de seguridad para el celular, el nextel, tu casa, el trabajo… más de uno tiene su hi5 o myspace bloqueado para que los extraños no puedan ver datos privados… vivimos resguardándonos hasta de nuestra sombra. Ya de nadie podemos confiar. Ni de amigos. Mucho menos de desconocidos. ¿Y la familia? Chale… a veces ni de ellos mismos!
¿Cómo llegamos aquí?
Y, lo peor… ni siquiera en nuestras putas autoridades podemos confiar!!!
Leí en la tarde que unas señoras se enfilaron hacia un retén militar, pues eran perseguidas por sicarios… y son recibidas a balazos por el ejército. Entre las muertas, una embarazada… y no digo lo de las putas autoridades sólo por este caso… o los cada vez más frecuentes “errores” de los milicos contra población civil, o como el caso de Zongolica, cuando violaron a una anciana y la CNDH decretó que murió de gastritis…
¿Cuántos altos mando antinarco han caído en últimas fechas? Y no cualquier pendejo… AAAAALTOS mandos… que recibían lana del narco para hacerse weyes y rolar información. O el exjefe de la Interpol México... ¿cuántas autoridades no se encuentran en la nómina del narco… o de plagiarios? ¿Cómo acudir ante esas “autoridades” a reportar un secuestro? ¿En cuántas bandas de secuestradores no se encuentran policías o expolicías? Caraxo…
Quizá todo hubiera seguido con la misma inercia el resto del sexenio. Pero los empresarios, mismos que llevaron al poder a Calderón con lana y spots en la campaña negra de odio, ya se vieron afectados. Tienen que mandar a su familia al extranjero, y vivir rodeados de guardaespaldas, a la espera que uno de ellos lo traicione y lo secuestre, o a su familia. Pagan en secreto el rescate de un familiar, y se van del país a toda prisa.
Pero el caso Marti hizo mucho ruido. Era un empresario poderoso que clamaba justicia. Y se sumó más gente al reclamo. Hasta marcha multitudinaria con velitas y toda la cosa.
Lamentablemente tuvo que pasar eso… un adinerado tenía que sufrir en carne propia lo que muchos de la plebe viven a diario, para que los medios hicieran un eco que durará más allá del noticiario de la noche.
Y luego otro caso terrible: Silvia Vargas, hija del extitular de la CONADE en el sexenio del imbécil de Fox.
Este caso me cimbró más que el niño Marti… siendo ambos igualmente desagradables. Pero en Silvia vi a la amiga… a la novia… al free… a la prima… a todas las mujeres que conozco, quiero y valoro.
Se me viene a la mente aquella frase célebre que da Magneto cuando le preguntan si mataría a un bebé Hitler a fin de evitar el caos de la Segunda Guerra Mundial, esperando un “no” por respuesta:
Para nada es una respuesta difícil. La respuesta es sí. Para salvar millones de vidas… rastrearía al niño hasta su hogar… y lo asfixiaría en donde estuviera recostado. Entonces, destruiría a su familia… y a la familia de su familia… ¡destruiría toda una ciudad desde sus cimientos y recogería sus cenizas de la tierra!
Si alguien se atreviera a dañar a una de mis chicas cercanas, juro por Alá que lo perseguiría hasta el maldito fin del mundo. Iría por él, o ella, y lo haría sufrir mil y un veces el daño causado. Creo que es la única cosa en la biblia que apoyo al 100%: “Se cobrará vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida, cardenal por cardenal” (Ex 21,23-25)… pero amplificado a la milésima potencia…
Quizá por eso sentí tanta empatía con el profe Nelsón Vargas en los momentos que apareció ante los medios, derramando lágrimas de dolor. No puedo imaginar peor sufrimiento en la existencia, que saber que tu niña, tu preciosa hija de escasos 18-19 años, fue secuestrada. Quizá abusaron de ella. Y la mataron los hijos de perra. Digo... tu niña coño! La bebita que cargaste alguna vez tiernamente en los brazos… la que viste correr, reír, llorar, cantar, ir a la escuela, andar con el novio… de repente cegada en su existencia por una bola de hijos de la gran perra que querían asqueroso dinero… gente en la que confiaste alguna vez, coludidos por las autoridades… caraxo!
Por eso me hierve la sangre la nota roja…
Pena de muerte, grito Moreira, como medida electorera, en miras al 2009. Y de inmediato las buenas conciencias dijeron que no…
Yo la apoyo totalmente. ¿Para qué dejar vivos a esos hijos de perra? ¿Para que salgan en un par de años y ahora vayan tras alguien cercano a ti? ¿Para que en la cárcel les den cátedra a raterillos de poca monta que en pocos meses fundarán su propia familia? ¿Para que el estado derroche dinero en ellos pudiéndolo ocupar en educación o campo? A la mierda la mentalidad moralista… el único inconveniente que veo es la gran corrupción que vive el Estado Mexicano… seguidamente, en más de un caso, pagarían justos por pecadores… meros chivos expiatorios para calmar los noticieros y la opinión pública rumbo a las otras elecciones, para que varios años después la familia del infortunado pobre diablo que se cruzó por el camino de judas corruptos reciban un “usted disculpe”.
Para hacer funcional bien la pena de muerte, tenemos que limpiar por completo el sistema judicial… una megareforma constitucional, como no la hay desde 1917. Aunque hay quien dice que si, simplemente, se aplicara la ley tal cual, no habría necesidad de Reforma, ni pena de muerte. Pero si los que nos representan legalmente, a quienes conferimos la autoridad de la soberanía nacional son los primeros que la violan…
Cuando el pinche terco del Peje abrió un paso a un hospital, se hizo el megaescándalo. Lo querían desaforar y meterlo a la cárcel, a fin de impedirle su paso a Los Pinos. ¿Y qué pasó cuando se comprobó que el Gober estuvo involucrado en el caso Lidia Cacho? ¿O con Ulises Ruiz y sus desapariciones forzadas en Oaxaca? ¿Los casos de narcogobernadores? ¿Y el edil de Puebla que presenció el espectáculo pornográfico y pedófilo de hace una semanas? Digo, y si nos vamos atrás, el 68, el halconazo, Aguas Blancas, Acteal… Colosio, Ruiz Massieu, el fraude del 88, el del 2006, la sospechosa fuga del Chapo… el caso de los Bribiesca, Punta Diamante, las Hummers…digo, al pinche Peña Nieto en vez de meterlo a la cárcel por lo de Atenco, ya hasta presidente lo queremos nombrar!!
Quién más ha violado la ley es el gobierno que dice aplicarla. Por ahí se debe empezar. Si tuvieran vergüenza, dejarían sus cargos cientos de funcionarios, empezando por Calderón, por tal de sanear la situación. Pero no. EL bien colectivo es lo que menos importa. Lo que vale, es la lana. Las jugosas partidas presupuestarias. Los negocios que se pueden hacer al amparo del poder, como lo hizo el calcinado Mouriño (fe de errtas: por semanas me faltó la “o”, y pues sorry, me apendejé).
¿Y entonces? ¿A dónde vamos?
El sendero es nada alentador. Cuando pasó lo de Morelia, dos expertos en materia de terrorismo, de la ONU, hablaron con Carmen Aristegui en CNN. Explicaron a la audiencia que aún hay salvación… aunque se deben tomar acciones ya, para evitar caer en grados de desorden social como los hay en regiones como Beirut o Colombia…
Actualemnte hay empresarios que pagan “protección” de grupos del narco, sobretodo en el norte del país. Le pagan impuestos, tributo. El Estado ha sido desplazado como preservador del orden social. Y lo peor: los empresarios también están recurriendo a la contratación de mercenarios de todo el mundo, a fin de que les sirvan de guardaespaldas familiar. Lo cual traerá una ola paramilitar como la que vive aún Colombia. Narco, milicos, paramilicos… sangre a borbotones. Vamos para allá, según estos expertos… al menos que, repito, el gobierno haga acciones tajantes. Que deje los spots de Adam Ramones y ponga las manos en acción.
¿Nosotros como ciudadanos, que papel jugamos en este embrollo sanguinolento? Mucho… fomentamos la corrupción… votamos por los ineptos que nos traicionan al llegar al poder… no ¿s quedamos callados… no denunciamos. Total, mientras no me pase, que chinguen todos a su madre. Pero no queremos meternos en problemas… precisamente porque las autoridades son una mierda. Caraxo… ¿de plano estamos jodidos? ¿Nos dirigimos, inexorablemente, a un movimiento sangriento como los de 1810 y 1910, a fin de derruir las estructuras de la corrupción y crear nuevos cimientos? Por la forma pacífica no se pudo en 1988, ni en 2006… ¿se podrá en 2012 con el regreso triunfal del PRI a Los Pinos?
Idealista como soy, hurgando en la red tras estos lamentables casos, entré a www.mexicosos.org, fundación que creó el empresario Marti, que aún se encuentra en etapa embrionaria, y me sumé… digo, no sólo sumándome así pondré mi granito de arena. Pero desde siempre he sido anticorrupción… respeto las leyes, y las fomento. Y denuncio cada que se debe hacer… ¿pero es todo lo que se puede hacer? ¿pero qué más? ¿rezarle a san Juan Diego en sus días?
Os dejo esta carta, desgarradora, del profe Nelsón Vargas, al respecto de su hija, publicada en http://www.silviavargas.com.mx/... Saludos, y ahí nos estamos leyendo, más frecuentemente, amados cuatro lectores…
P.D. De vivir en el D.F., mega-ateo y toda la cosa, iría a la misa de cenizas de Silvia. De blanco… pero en mi forma astral lo haré, ya que diablos…
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