En Wal-mart están un poquito atrasados en cuanto a la historia mexicana, y creían que aún estábamos en épocas de mi general Porfirio Díaz Mori, cuando el "patrón" hacía con impunidad lo que quisiera con los derechos humanos/laborales de sus trabajadores. Pero, oh, sorpresa, no estamos en 1900, como también lo quisiera la cerda iglesia católica apostólica romana y los políticos demagogos mexicanos... Helllouuuu... estamos en 2008, y ese viejo concepto de la tienda de raya ha caducado, junto con el siglo XX y su miseria de porquería.
En un fallo histórico, que sentará precedentes aunque no lo estén manejando así (estudié como dos años derecho, no estoy tan wey...), un indígena de Chihuahua llamado Raúl Ávila Andujo le ganó una demanda al coloso multinacional " por retirarle el transporte que lo llevaba de La Villita, su pueblo, a Chihuahua, y obligarlo a gastar sus vales de despensa en las propias tiendas de la cadena"...
Con esto, podría recibir una indemnizaciónde medio millón de pesos, además de que le regaló a los cien mil "asociados" de Wal-Mart la maravillosa oportunidad de demandar a la voraz coorporación...
"A ver si no me dan cuello", dijo... pero no se animaría el monstruo, por más que lo odie... pero ojalá los "asociados" tengan los huevitos para demandar a la empresa y hacerla tronar, por sus múltiples violaciones laborales alrededor del mundo... bien por eso!
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